Usina de códigos de barra de la vida - Uruguay
Todas las especies juegan un papel en el óptimo funcionamiento de los ecosistemas, y proveen importantes servicios para sostener la vida en la tierra [1]. Los ecosistemas saludables son clave para la seguridad alimentaria, el control de plagas, la conservación de los repositorios de agua dulce, la protección frente a eventos climáticos extremos, la conservación del suelo, el desarrollo del turismo, entre otros [2].
Código de barras de la vida
En respuesta a las limitantes de la taxonomía clásica, a partir de los años 80 se promovió el estudio molecular de la biodiversidad con el desarrollo de las técnicas de PCR y secuenciación automatizada del ADN, aportando herramientas rápidas, y accesibles, para la prospección y el monitoreo de la biodiversidad.
Hace casi dos décadas, Hebert et al. [4] propuso un sistema estandarizado para la identificación de especies basado en ADN, se formó entonces el primer Consorcio para el Código de Barras de la Vida (CBoL; www.barcodeoflife.org).
Antecedentes del nodo uruguayo de códigos de barra de la vida
La primera iniciativa para una base de referencia de secuencias tipo barcode (Código de Barras de la Vida, CBV) a escala país fue impulsada en 2014 por el entonces Ministro de Educación y Cultura, Dr. Ricardo Ehrlich 06/30/2021 [5].
En 2018, con el financiamiento del CDB, se organizó un curso PEDECIBA-Udelar (responsables M. Cosse y R. Segui). Dentro de los objetivos del proyecto se planteó avanzar con la creación de un Nodo Nacional de CBV. Estas acciones lograron sumar a la Secretaría Nacional de Ciencia y Tecnología (SNCyT), que apoyó la iniciativa 06/30/2021[6]. A partir de 2020 la Dirección Nacional de Innovación, Ciencia y Tecnología (DICyT) del MEC acompaña el proceso iniciado por la SNCyT.
Obtención de fondos de IDRC-ANII para que ocho estudiantes de las instituciones participantes del Consorcio realicen una estancia corta de entrenamiento en ADN barcoding en el Laboratorio de P.Hebert (Canadá, www.uoguelph.ca/ib/hebert).
Lista de participantes:
![]() | Diego Arrieta, MNHN-MEC |
![]() | Mauricio Bonifacino, Facultad de Agronomía-Udelar |
![]() | Ernesto Brugnoli, Facultad de Ciencias-UdelaR |
![]() | Arley Camargo, CENUR Noreste-UdelaR |
![]() | Leandro Capurro, Facultad de Ciencias-UdelaR |
![]() | Federico Condón Unidad de Semillas y Recursos Fitogenéticos – INIA |
![]() | Mariana Cosse, IIBCE-MEC |
![]() | Alejandro D'Anatro, Facultad de Ciencias-Udelar |
![]() | Eugenia Errico, DINARA-MGAP |
![]() | Graciela Ferrari, LATU |
Mario Giambiasi, INIA | |
![]() | Gabriela Jorge, Facultad de Agronomía-Udelar |
![]() | Claudio Martinez, Facultad de Ciencias-UdelaR |
![]() | Ana Laura Mello, DINABISE-MA |
![]() | Vitor Pacheco, Facultad de Agronomía-Udelar |
![]() | Clara Pritsch, Facultad de Agronomía-UdelaR |
![]() | Silvana Ravía, DICYT |
Nestor Ríos, Facultad de Ciencias-UdelaR | |
![]() | Rosina Segui, DINACEA-MA |
![]() | Sebastián Serra, MNHN-MEC |
![]() | Cecilia Da Silva, CENUR Noreste-UdelaR |