3.6) Análisis de la degradación de bosque nativo
Gran proporción del bosque nativo en el país tiene diferentes grados de degradación y alteración, dependiendo de la zona del país, su accesibilidad, la presencia de ganado, caminera y cercanía de centros urbanos. Se estima en un 40% los sectores monopodiales que no presentan signos de talas masivas con una intervención humana de menor impacto.
El bosque secundario, alterado por las intervenciones del hombre, presentará problema en el equilibrio futuro ya que se afectó su densidad, su proporcionalidad específica y variedad genética. Prevalecen unas especies sobre otras cuando originalmente no era así. Además, los sectores intervenidos son especialmente susceptibles a la colo- nización de especies exóticas invasoras. Reconocida la amenaza real y latente que representan las especies exóticas invasoras, existe una lista nacional de 17 especies vegetales, de las cuales 10 son leñosas y están señaladas como invasoras agresivas.
El cambio de uso de la tierra (bosque-agricultura) ejecutado en el último siglo, representa una afectación significativa en cuanto a pérdida de superficie y biodiversidad, principalmente sobre los bosques de parque litoraleño y bosques aledaños a cuencas, como las de los ríos Tacuarembó, Negro, Cebollatí y Santa Lucia. Además se observa una depredación de bosques nativos cercanos a centros poblados y ciudades (tala ilegal de leña) causando degradación y disminución de biodiversidad y variedad genética. Cambios en los regímenes hídricos, canales de desecación y modificación de escorrentías ligadas a procesos productivos generalmente agrícolas y también ganaderos afectan al bosque nativo. Los sectores con degradación son aquellos fuertemente intervenidos en el pasado, en donde las talas rasas involucraron amplias superficies que fueron invadidas por especies invasoras agresivas.
Sumado a lo anterior, el BN puede verse afectado en forma eventual por factores bióticos y abióticos, incidiendo en el crecimiento y supervivencia del mismo. Incrementos en poblaciones de ciertos agentes de daño como insec- tos, hongos u otros organismos que se desarrollan rápidamente pueden generar perturbaciones esporádicas con la consiguiente degradación del ecosistema bosque.
Limitantes
- No existe un monitoreo sistemático integral (deforestación, degradación, EEI, incendios, plagas u otras amenazas).
- Pocos conocimientos de los impactos de cambios en los regímenes hídricos, canales de desecación y modificación de escorrentías.
- El conocimiento sobre avances, métodos de combate, restauración, prevención o potencial valor económico de las especies exóticas invasoras aún es muy limitado.
- Existe poco conocimiento sobre métodos comprobados con vigor científico de restaura- ción para enfrentar la degradación.
- Técnicas de manejo en bosque secundario poco desarrollado, sistematizado y divulgado.