Ministerio del Interior

La Guardia Republicana desarrolló la tercera edición del curso de operadores de vehículos lanza agua que contó una duración de dos semanas y fue dirigido a funcionarios de la Unidad de Intervención. Esta capacitación está orientada a policías de la Guardia Republicana que ya cuentan con el curso de operador antidisturbios, formación previa requerida para manejar este tipo de vehículo especializado.

La instrucción se dividió en dos fases. En la primera semana, los participantes trabajaron con el camión hidrante en estado estático, practicando el encendido de la consola y el acople de la bomba, que opera junto con la caja de cambios. En la segunda semana, se avanzó con maniobras en movimiento y con técnicas de lanzamiento de agua, como los disparos intermitentes, en abanico o de barrido, dependiendo del escenario simulado.

“El curso busca que los tres integrantes del camión —chofer, operador y encargado— puedan coordinar sus tareas en tiempo real. El sistema no funciona si no hay sincronización entre todos”, explicó el Teniente Marcelo Caraballo, responsable de la capacitación. Agregó también que los lanzamientos son utilizados principalmente en situaciones de disuasión y apoyo a intervenciones en vía pública, siempre acompañados de un grupo de intervención.

La formación contó además con la participación de la Dirección Nacional de Bomberos, que brindó un taller sobre extinción de focos ígneos, sumando una dimensión operativa adicional al uso del vehículo lanza agua.

Uno de los cursantes destacados fue el Sargento Gonzalo Benavente, quien recibió un reconocimiento por su rendimiento. “Aprendí a manejar una herramienta que suma en la calle. Es algo que me va a servir en el trabajo operativo”, señaló.

En esta edición, se destacó también la participación de la Guardia Sofía Quijano, quien se desempeñaba como chofer en la unidad y se convirtió en la primera mujer en completar esta capacitación. “Al principio estaba insegura porque nunca había manejado este tipo de vehículo, pero después le agarré confianza. Me gustan los camiones y quería aprender más”, expresó. Durante el curso, asumió funciones como chofer, operadora y encargada, y recibió la mejor calificación de su tripulación.

Consultada sobre el hecho de haber sido la primera mujer en cursarlo, Quijano sostuvo: “Estoy orgullosa, y me gustaría que otras compañeras también se animen. Si te gusta, hay que intentarlo”.

Con esta edición, la Guardia Republicana continúa formando personal capacitado para operar camiones hidrantes en situaciones complejas, fortaleciendo el trabajo en equipo y ampliando la integración en sus unidades especializadas.