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Tres historias de vida, compromiso y el legado imborrable de retirados policiales

El Día del Retirado Policial, celebrado cada 30 de octubre desde 1995, honra el compromiso y legado de quienes sirvieron con honor en la fuerza. Este año, la Dirección Nacional de Asistencia y Seguridad Social Policial lo conmemoró con actividades como la Jornada Nacional de Asociaciones de Retirados y un CAmpeonato de conga y truco en el Parque Policial. Además, se destacaron historias de policías retirados como Ramón Silva, autor de Noches Azules; Lilian Guedes, quien valoró los lazos de compañerismo; y Teresita Angelelli, pionera en la Policía Femenina y creadora de una marcha que celebra su trayectoria.
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El Día del Retirado Policial, celebrado cada 30 de octubre, fue instituido en 1995 de la mano del Comandante (R) Gervasio Somma, entonces presidente de la Asociación Nacional de Policías en Retiro del Uruguay (ANPRU). En una histórica Asamblea General realizada ese año en el Cine Metro de Montevideo, con la participación de 23 asociaciones de retirados de todo el país, Somma propuso dedicar esta fecha a homenajear a quienes sirvieron con honor en la fuerza policial. La propuesta fue aprobada por unanimidad, marcando el inicio de esta significativa celebración.

Desde entonces, esta jornada ha simbolizado el reconocimiento y la unión de los policías en situación de retiro, destacando su compromiso y legado. La creación de esta fecha recuerda la importancia de valorar su servicio, tanto durante su actividad como en su retiro, consolidando un vínculo indisoluble con la sociedad a la que dedicaron sus vidas.

En tal sentido, este 2024 la Dirección Nacional de Asistencia y Seguridad Social los celebró con diferentes actividades como la Jornada Nacional de Asociaciones de Retirados Policiales y el Campeonato de Conga y Truco.

En este marco, compartimos las historias de tres policías retirados que encarnan los valores y el espíritu de este día especial. 

 

Entrevista a Suboficial Mayor (R) Ramón Silva

Nombre y edad:
Ramón Silva, 65 años.

¿En qué unidad ejecutora trabajó?
Trabajé inicialmente en comisaría de menores, solo un corto tiempo. Después pasé muchos años en patrulla, en el turno de noche. Luego estuve algunos meses en la brigada de asalto, y después volví a la comisaría y al 911, donde trabajé cuatro años. Finalmente, fui asignado a la división de automotores, donde me jubilé.

¿Cuándo se retiró?
Me retiré como suboficial mayor, por acto directo de servicio, en el año 2011, con casi treinta años de servicio.

Cuénteme un poco de su vida como policía activo, patrullando las calles.
Fui herido dos veces. La segunda vez fue un disparo en la cadera, muy complicado. Me recomendaron jubilarme, pero me resistí y aguanté cinco o seis años más. 

Eso fue lo que más me marcó, porque quería retirarme de otra manera. Me hubiera gustado terminar enseñando en la escuela de policía, especialmente en las áreas de armas y tiro, que me gustan mucho.

Estoy muy agradecido a la policía. Aunque soy retirado, todavía me siento policía. Es un sentimiento muy profundo, un gran fanatismo que desarrollé por todo eso.

¿Ese sentimiento lo llevó a escribir el libro "Noches Azules"?. ¿Cómo surge la idea?
El libro* lo escribí por cuatro razones. Primero, para contar lo que uno vive, las cosas que a veces no puede expresar. Segundo, para destacar el rol del policía y las dificultades que enfrenta. Tercero, para que el ciudadano entienda lo que significa ser policía. Y cuarto, en honor a los grandes amigos que tengo. Amigos que me ayudaron el día que recibí el disparo, que estuvieron ahí cuando tuve que dejar mi casa. Me cuidaron mucho; son mis verdaderos amigos.

¿Un mensaje para los policías en actividad?
Siempre queremos dejar un mensaje para los policías nuevos. Es importante que aprendan de los errores y que sepan que, para ser policía, uno debe tener códigos y mantener siempre una buena conducta.

* El libro puede ser adquirido en Casa Aventureros. Contacto: 098 121 292.

Entrevista a Sargento (R) Lilian Guedes 

Nombre y edad:
Sargento retirado Lilián Graciela Guedes Hernández, 70 años.

¿En qué unidad ejecutora trabajó?
Primero ingresé en la Jefatura y luego pasé a la Policía Femenina, la Comisaría de Mujeres, y finalmente me retiré en la Seccional 19.

¿Cuántos años de servicio alcanzó?
29 años, 6 meses y 18 días.

¿Hay policías en su familia?
Sí, mi papá falleció siendo policía, y yo ingresé cuando cumplí 18 años. También tengo hermanos policías.

Hace poco participó en una reunión con otras policías en situación de retiro. ¿Qué le hizo sentir esa actividad?
Fue muy emocionante reencontrarme con viejas compañeras y recordar a aquellas que ya no están y no van a estar. Fue muy lindo, la verdad. Compartimos anécdotas, charlas, recuerdos... "¿Te acordás de tal cosa? ¿Te acordás de tal otra?"

¿Un mensaje para los policías en actividad?
Mi mensaje para los policías hoy en día es que se cuiden las espaldas unos a otros. Nada más.

 

Entrevista a Suboficial Mayor (R) Teresita Angelelli

Nombre y edad:
Nora Teresita Angelelli Rodríguez, 80 años.

¿En qué unidad ejecutora trabajó?
En el Cuerpo de Policía Femenina, que estaba en el quinto piso de la Jefatura cuando ingresé, en Montevideo.

¿En qué año se retiró?
En 1998.

¿Algo que le haya marcado de su período como policía femenina en actividad?
Cuando ingresé a la Policía Femenina fue en la segunda tanda. Las primeras entraron en el 67, creo, y luego entramos nosotras, un grupo muy pequeño, en el 70. La función de la Policía Femenina era la custodia de toda persona de sexo femenino, tanto en la comisaría como en cualquier departamento de Jefatura. Teníamos que acompañarlas, por ejemplo, si iban a juzgados, si estaban internadas, y cosas similares.

Después trabajé en la comisaría, cuando se disolvió el Cuerpo, y cada vez que una persona entraba a la oficina, pensaba: "Ay, ¿con qué problema vendrá?" En esta función, tenías que aprender a resolver los problemas de los demás. Fue entonces cuando nos hicimos un poquito más fuertes. Fui la primera policía femenina en las Seccionales como encargada del servicio interno que siempre estaba a cargo de un policía masculino.

Y ahora, como retirada, es la creadora del himno de la Policía Femenina.
Me invitaron a una reunión, y fue muy agradable; fue una sorpresa ver a personas como Fulana o Mengana, y abrazarnos. Durante las horas que estuvimos conversando, me vine a casa, y esa noche, al acostarme, pensé: "Qué lindo, ¿no?, que nos reunimos todas".

Entonces, empecé a escribir. Como siempre, agarré un cuaderno y anoté algunas cosas que me surgieron en el momento. No tenía la intención de hacer nada especial, mucho menos un himno. Simplemente, pensé en cómo empezamos y cómo fue nuestra trayectoria en ese pequeño grupo de mujeres. Todo eso se juntó en mi cabeza, y por eso hice esto, que ellas llaman un himno. Para mí, es una marcha para el Cuerpo de Policía Femenina.

 

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