Antecedentes
La formación de Auxiliares de Enfermería en nuestro país se desarrolla por dos mecanismos. Una es la oferta pública llevada a cabo a través de la Facultad de Enfermería - Universidad de la República (UdelaR), la cual tiene dos vías de egreso: la carrera de Licenciatura en Enfermería que habilita en el tercer año al estudiante como Auxiliar de Enfermería otorgándole un título intermedio o mediante el curso de Auxiliar de Enfermería Integral que se imparte también allí paralelamente.
La oferta privada está dada mediante la Universidad Católica del Uruguay “Dámaso Antonio Larrañaga” que al igual que la UdelaR dentro de su oferta educativa mediante la Facultad de Ciencias de la Salud, tiene la carrera de Licenciado en Enfermería brindando en el segundo año de la misma el título intermedio de Auxiliar de Enfermería.
Por otra parte, se encuentran las escuelas de enfermería privadas reguladas por el Ministerio de Educación y Cultura (MEC) que brindan de manera privada el curso Auxiliar de Enfermería Integral.
Hasta la fecha las ofertas educativas de las escuelas privadas habilitadas por el MEC y la oferta del Curso Auxiliar de Enfermería Integral por parte de la Facultad de Enfermería se han basado en la normativa vigente para impartir los cursos; esta refiere a la Ordenanza N.º 930 (Decreto del Poder Ejecutivo Nº 518/981 de 13/10/81) (5) como programa de estudios y a las ordenanzas N.º 24/85 (Decreto del Poder Ejecutivo 444/85 de 20/8/85) (6) y Nº 23/88 del 28/10/88, (7) ambas reglamentan al plan.
La normativa que se aplica son competencias que se trasladaron al MEC mediante el Decreto 90/006 del 22 de marzo del 2006 (8), y es el plan de estudio para el curso que fue realizado en el año 1981, el cual migra las mismas de la Escuela de Sanidad “Dr. José Scosería” - MSP.
En el mismo se identificaron diversos factores que evidenciaron la necesidad de esta transformación: relación docente estudiante existente, la cual es mayor a la recomendada en la bibliografía para la enseñanza de Enfermería, necesidad de didácticas específicas y métodos más personalizados de enseñanza, etc.
En el orden que implica el proceso de enseñanza aprendizaje se observó una relación teoría -práctica en cuanto a la carga horaria desproporcionada; en el proceso de ejecución de los planes, se consideró que debían incluirse otras herramientas de aprendizaje complementarias como son la educación virtual y simulada.
Se ha podido sintetizar en los últimos años que la Ordenanza N.º 930 tiene una estructura rígida que dificulta que el estudiante construya trayectorias autónomas, provocando el retraso del mismo en los módulos de aprendizaje del curso por la ubicación de las materias en su estructura general.
Por otra parte, se ven asignaturas de baja carga horaria que no llegan a configurarse como una, lo que conlleva una sobrevaluación y aumento del contenido general, no brindando el resultado esperable.
Es por los motivos antes expuestos que para el cambio de currícula del curso “Auxiliar de Enfermería Integral”, luego de 40 años se creó una Comisión de trabajo integrada por la UDELAR - Facultad de Enfermería, la Comisión Nacional de Enfermería (CONAE), el Ministerio de Educación y Cultura - Oficinas habilitadas de Escuelas de Enfermería y un representante de las Escuelas Habilitadas de Enfermería Privadas.