La metodología del Proyecto AIT
La estrategia metodológica se apoya y parte de las demandas y características específicas de cada centro educativo. En este sentido, la intervención es flexible durante todo el proceso de acompañamiento e implica un análisis situado de la realidad local y sus necesidades de inclusión en educación.
Esquemáticamente, el proceso de trabajo se compone por las siguientes fases:
Familiarización
Es la etapa que da inicio a la intervención y que se caracteriza por indagar en la realidad del centro educativo, su equipo y contexto territorial, identificando buenas prácticas pre-existentes y realizando un mapeo de recursos y potencialidades de Educación Inclusiva propias de la localidad.
Construcción de demanda
Consiste en la problematización de demandas y la definición de objetivos de valor estratégico a través del trabajo conjunto con el equipo educativo y la atención a las situaciones emergentes.
Planificación de acciones oportunas
Es el diseño de las actividades de formación, asesoramiento, producción de materiales, sensibilización y articulación institucional que permitirán avances en la estrategia de Educación Inclusiva, en acuerdo con el equipo educativo.
Desarrollo de acciones oportunas
Corresponde a la ejecución de las acciones previstas y su registro, con ocasiones para la reflexión y la adaptación a la coyuntura del centro educativo.
Valoración de la experiencia
Se trata de sistematizar y evaluar de forma conjunta las acciones realizadas y el proceso vivido por la comunidad educativa, con el fin de capitalizar su experiencia, identificar desafíos futuros e impulsar al equipo docente a ser multiplicadores de Educación Inclusiva.