Anuario de OPYPA 2022

Contribuciones y desafíos para fomentar el desarrollo sostenible y conservación de los bosques a nivel nacional

Mariana Boscana

Patricia Escudero

Joaquín Garrido

Gastón Martinez

La Dirección General Forestal (DGF) del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP) es el organismo ejecutor de la política forestal a nivel nacional. Entre sus cometidos se establecen la conservación del bosque nativo y la ampliación de la base forestal del    país a través de plantaciones forestales según la segunda Ley Forestal N° 15.939 del 28     de diciembre de 1987 y sus decretos reglamentarios. Desde entonces, Uruguay cuenta con un marco político y jurídico sólido que ha permitido cumplir los objetivos planteados. Los principales logros han sido la ampliación de la superficie de bosques a nivel nacional, el desarrollo de la fase industrial, avances en investigación e innovación en diferentes cadenas del sector foresto-industrial, la certificación de manejo sostenible de sus bosques (FSC, PEFC, UNIT), entre otras fortalezas que lo distinguen a nivel internacional.

  • 1. Cifras y proyección del sector forestal

Con base en la última cartografía forestal nacional de la DGF al año 20215 , y estimaciones a partir de la encuesta de producción de plantines correspondiente al año 20216 , se estima que la superficie efectiva de uso forestal correspondientes a bosques plantados es de 1.100.000 hectáreas. De éstas, alrededor de un millón de hectáreas efectivas se destinan para diversos destinos comerciales a nivel nacional y para exportación de madera en rollo7.

Dentro de las especies predominantes se encuentra Eucalyptus grandis con una ocupación estimada de 324.000 ha efectivas, cuyos modelos productivos están orientados a la transformación química (pulpa de celulosa) y mecánica (procesos industriales de aserrío y debobinado). Alrededor de 150.000 hectáreas ocupadas por dicha especie, presentan como destino final la producción de madera sólida para industrias de transformación mecánica, con manejos silvícolas intermedios de podas y raleos durante el ciclo del cultivo, con turnos de cosecha entre los 15 a 20 años.

En orden de importancia le sigue Eucalyptus dunnii con aproximadamente 316.000 ha9, cuyo destino comercial es la transformación química. En menor medida Eucalyptus globulus y Eucalyptus maidenii que en su mayoría están orientados a la producción de chips para exportación. Para ambas especies el área tiende a disminuir por problemas sanitarios, estimándose un 31% de pérdida de superficie entre los años 2018 y 2021, pasando de 140 a 100 mil ha. Principalmente dicha área hacia la región sureste del país, ha sido sustituida en su mayoría por Eucalyptus smithii, y en menor proporción por E. dunnii, por su tolerancia a heladas en zonas bajas del terreno, cuyos objetivos productivos se mantienen. Para E. smithii, su participación a nivel de producción de plantines en viveros continúa en aumento, pasando de 400 mil a 11 millones de plantines entre el año 2013 y 2021 respectivamente.

Por su parte, Pinus elliottii y Pinus taeda representaban al año 2021 alrededor de 150.000 hectáreas efectivas, cuyo perfil productivo está orientado a la producción de madera sólida, la cual es consumida por industrias de aserrío y debobinado a nivel nacional y para la exportación como madera rolliza. Los turnos de cosecha superan los 20 años e implican manejo de podas y raleos durante el ciclo del cultivo.

Si se compara con la superficie de la cartografía del año 201810, la misma disminuyó en un 17%, siendo sustituídas en su mayoría por especies del género Eucalyptus, principalmente E. grandis y en zonas bajas del terreno por la especie E. dunnii. Entre el período 2018-2021, la extracción promedio anual de madera rolliza de Pino estuvo en el orden de los 3,2 millones de m3, de los cuales el 63% del volumen promedio anual tuvo como destino la exportación hacia el mercado asiático. A su vez, la producción en vivero es del orden del 1% del total producido anualmente, por lo que la disponibilidad de plantines no compensa las pérdidas de superficie acontecidas en el período.

Considerando únicamente la madera rolliza con destinos industriales de aserrío y debobinado (trozas de Coníferas y No Coníferas11) y pulpa de celulosa (madera rolliza o en chips de No Coníferas ), tanto para consumo a nivel nacional como exportación, los volúmenes extraídos pasaron de 1,5 a 15,6 millones de m3 para el período 2000-2021 (Gráfico 1).

Gráfica 1. Evolución de la extracción de madera rolliza (principales destinos) período 2000 – 2021

Fuente: Elaboración propia con base en Estadísticas DGF (2022).

Nota: Se considera “extracción” la madera rolliza que se extrae del bosque para sus diferentes usos a nivel nacional o para exportación. Principales destinos: no se considera uso para energía, trozas para pulpa rolliza o en chips de Coníferas y otros usos de la madera (columnas, postes, varejones).

El mayor aporte a éstos volúmenes anuales correspondió a diferentes especies del género Eucalyptus (variando entre el 75 y 94% en su aporte según año). La evolución en la extracción está directamente relacionada a la maduración y disponibilidad de la madera provenientes de bosques cultivados, cuya mayor expansión estuvo asociada a la implmentación de la segunda Ley Forestal.

La superficie destinada al cultivo forestal era inferior a las 180.000 hectáreas, previo al año 1990. El incremento promedio en nuevas áreas era de 3 mil hectáreas anuales. Entre el período 1991-2000 la expansión en nuevas áreas se incrementa gradualmente, estimándose al año 1991 en 13.000 hectáreas y, hacia el año 2000, en 57.000 hectáreas (pico máximo de la serie histórica). A partir del año 2001, la expansión tiende a disminuir (con años excepcionales: 2001, 2007 y 2008), cuyo promedio anual se establece en el orden de las 20.000 ha hasta la actualidad13.

Considerando los últimos 10 años (período 2012-2021) para los principales destinos industriales antes mencionados, el promedio de extracción anual estuvo en el orden de los 11,8 millones de m3 (con incrementos graduales durante la serie, partiendo en el año 2012 de 6,8 hacia 15,7 millones de m3 al año 2021). De éstos, un 77% promedio anual estuvo destinada principalmente a la producción de pulpa de celulosa a nivel nacional y, en menor medida, para exportación de chips (variando ambos entre el 69 y 86% en su aporte según año). Los incrementos para este destino industrial están asociados a la puesta en operación de dos plantas de celulosa en el país (UPM-Fray Bentos (año 2007) y Montes del Plata- Conchillas (año 2014)).

Para el mismo período (2012-2021), la extracción de trozas para aserrío y/o debobinado para consumo local o exportación (Coníferas y No Coníferas), tuvo una participación promedio anual en volúmenes extraídos del 23% (variando entre el 14 y 29% en su aporte según año). Para el caso de las trozas destinadas a aserrío y debobinado provenientes de bosques de Eucalyptus, no se observa grandes variaciones en extracción, cuyo promedio anual se ubica en los 900 mil m3 (con mínimos de 700 mil a valores máximos de 1,3 millones de m3). Por su parte, la extracción de madera de Pino comienza a incrementarse a partir del año 2016-2017 producto de la demanda de madera en rollo para exportación hacia el mercado asiático (con mínimos dentro del período de 171 mil a valores máximos de 3,9 millones de m3 extraídos).

En cuanto a la producción, el país cuenta con más de 90 aserraderos de diferente escala   de consumo, más de 10 industrias de impregnación identificadas, dos plantas de celulosa en funcionamiento (producción total anual se ubica en el orden de las 2,7 millones de toneladas) y una planta de tableros contrachapados (con una producción anual estimada de 250 mil m3).

Adicionalmente, duranteesteañosecomenzólainstalacióndeunaplantaeneldepartamento de Tacuarembó para la obtención de madera para uso estructural, siendo el producto a obtener CLT (Cross Laminated Timber por su sigla en inglés). Además, los departamentos de Treinta y Tres y Cerro Largo, surgen como un nuevo eje de desarrollo foresto-industrial. Como resultado, a comienzos del año 2023, se espera que comience la operación de una nueva planta de debobinado en el departamento de Treinta y Tres, cuyo objetivo será la producción de láminas de diferentes espesores de E. grandis, produciendo alrededor de 21.000 m3 anuales al inicio, esperando duplicar esa cifra en sucesivos años14.

Según información aportada por Uruguay XXI, existe la oportunidad de inversión extranjera durante el año 2023 en el mismo departamento para uso de la misma especie, cuyo producto será madera contrachapada, con una producción anual estimada de 75 mil m3. Se espera además que entre el año 2023 y 2024, se instale un aserradero de capitales extranjeros en el departamento de Rivera, cuya producción de madera aserrada de P.  taeda estará en el orden de los 96 mil m3. Ambas inversiones extranjeras estarán orientadas a la exportación de sus productos.

En relación a la producción de celulosa a nivel nacional, la tercera planta (UPM2- sobre     el Río Negro entre las localidades de Pueblo Centenario (Durazno) y Paso de los Toros (Tacuarembó)) quedará operativa hacia la mitad del año 2023. Esto implicará un consumo anual de madera rolliza de Eucalyptus del orden de 7,5 millones de m3 que se traducirán en una producción de 2 millones de toneladas de pulpa anual.

Considerando los valores de extracción de madera al año 2021 y todos los destinos comerciales y usos de la madera para Coníferas y No Coníferas (trozas para transformación mecánica, química, energía y otros usos (columnas, postes, varejones)), la extracción anual total fue del orden de los 18 millones de m3. Tomando como base dichos valores, y según las nuevas inversiones industriales antes mencionadas, es de esperar que los volúmenes anuales extraídos podrían llegar a cifras al año 2024 que superen los 25 millones de m3.

Por último, las exportaciones de productos forestales al año 2021 alcanzaron los 2.200 millones de dólares, abarcando más de 60 países distribuidos en todos los continentes, siendo los países de Asia y Europa los principales destinos. El sector se ha posicionado entre los más importantes rubros de exportación a nivel agropecuario, cuya tendencia apunta a continuar creciendo y aportando a la economía del país.

  • 2. Acciones y proyectos vinculados a la gestión y conservación de los bosques

La DGF como organismo rector de la política forestal a nivel nacional, viene ejecutando líneas de trabajo y acciones tendientes a la conservación, protección, gestión y desarrollo de los recursos forestales del país. En este sentido, muchas de las iniciativas han surgido desde la propia Institución como entidad referente en la temática, articulando a su vez, con los diferentes actores e Instituciones públicas y privadas vinculados. Así mismo, la DGF participa de forma activa en diversos ámbitos y proyectos liderados por otras Instituciones para promover y profundizar nuevas áreas de desarrollo forestal. A continuación se destacan las principales acciones y líneas de trabajo en cada tipo de bosque (plantados y nativos), donde la Institución participa liderando o colaborando de forma permanente.

2.1. Iniciativas y proyectos vinculados a bosques plantados

Referentes a la vigilancia sanitaria e incendios

  • Comité ejecutivo de coordinación en plagas y enfermedades forestales (CECOPE) Desde su creación por resolución ministerial en el año 2001, tiene como cometido principal definir e implementar la estrategia a seguir así como las principales líneas de trabajo en los temas fitosanitarios forestales de forma coordinada con las instituciones que la componen (DGF quien la preside, Dirección General de Servicios Agrícolas (DGSA), Sociedad de Productores Forestales (SPF) e Instituto Nacional de Investigación Agropecuaria (INIA)).

Como uno de los resultados relevantes, se destaca la aprobación de la “Estrategia Nacional de Manejo Forestal para la Salud y Vitalidad de los Bosques Plantados” en el año 2012, el cual se basa en ocho Lineamientos Estratégicos, dentro de los cuales se destaca el “Sistema de Nacional de Vigilancia Fitosanitaria Forestal” (SINAVIFF) priorizado dentro del Plan de Actividades de estos últimos años.

Los esfuerzos se centraron en diseñar y sentar las bases para el desarrollo del SINAVIFF con el objetivo de determinar la condición fitosanitaria de las plagas (ausencia o presencia) y distribución en un área, así como realizar la detección temprana de nuevas plagas mediante la recolección, generación, registro y análisis de la información disponible.

Por su parte, el desarrollo de una Plataforma informática a cargo del Consorcio Forestal (SPF, INIA, Laboratorio Tecnológico del Uruguay (LATU)) que permite alojar la información fitosanitaria forestal, procesarla con diversos niveles de automatismo para generar reportes y alarmas, los cuales son fundamentales para la eficacia del sistema. Actualmente, la Plataforma se encuentra en un proceso de análisis y mejora en el ámbito del Comité Técnico Asesor (CTA) conformado por representantes del CECOPE y la Universidad de la República (UdelaR) (Facultades de Agronomía, Ciencias, Química, Ingeniería, entre otros).

La coordinación interinstitucional a nivel nacional, además ha permitido la introducción y liberación de controladores biológicos para plagas de relevancia como la Chinche de los Eucaliptos Thaumastocoris peregrinus y Avispa de la agalla Leptocybe invasa, realizado en el marco de cooperación regional en el ámbito del Comité de Sanidad Vegetal  del Cono  Sur (COSAVE) y el Programa Cooperativo para el Desarrollo Tecnológico Agroalimentario    e Agroindustrial del Cono Sur (PROCISUR). Así mismo, la organización de actividades de difusión y sensibilización como son las “Jornadas de Sanidad en Viveros Forestales” desde el año 2017, a cargo de representantes de diversas instituciones, referentes técnicos de viveros privados y de la academia, son parte de los resultados altamente positivos de dicho Comité.

De esta manera el sector forestal, a través del esfuerzo conjunto y complementario de diversos actores nacionales y regionales, tanto públicos como privados, continúan apostando a un manejo sanitario sostenible de nuestros bosques.

  • Acciones de protección contra incendios forestales

En el marco de los cometidos de promover el Manejo Forestal Sostenible se llevan adelante diversas acciones que apuntan a lograr la conservación, manejo y protección de los bosques a nivel nacional. Los incendios forestales constituyen una gran problemática que requiere el desarrollo de estrategias para su prevención, reducción de riesgos y combate, articulando con otras instituciones para lograrlo.

Dentro de las actividades que la DGF realiza anualmente para la protección de los bosques, se encuentran el estudio técnico y las inspecciones por el cumplimiento de los “Planes de Prevención de Incendios Forestales”, incluidos como requisito para la presentación y aprobación de los Proyectos Forestales a nivel nacional. Por su parte, se han intensificado las inspecciones en lo que va del presente año, así como impulsado la actualización y ajuste de normativa que incluyen medidas sancionatorias por incumplimiento.

En forma complementaria, se trabaja interinstitucionalmente en la “Mesa de Análisis de Incendios Forestales y Quemas a cielo abierto” (MAIF) creada este año por el Sistema Nacional de Emergencias (SINAE) dependiente de Presidencia de la República e integrada por la Dirección Nacional de Bomberos (DNB), Defensa Nacional (DN), DGF, Dirección Nacional de Ordenamiento Territorial (DINOT) y el Ministerio de Ambiente (MA). A su vez participan el Instituto Uruguayo de Meteorología (INUMET), Banco de Seguros del Estado (BSE) y la SPF, entre otros invitados. Cabe destacar que los primeros trabajos del MAIF fueron la actualización de normativa referente al “Plan General de Acción para prevención, alerta y respuesta a los Incendios Forestales” y en breve está previsto comenzar con el análisis del proyecto presentado por la Dirección Nacional de Bomberos sobre un “Plan Nacional de Quemas”.

Como aporte a la realidad nacional, se han organizado campañas de sensibilización y participación en jornadas educativas en escuelas rurales, concientizando de la problemática sobre incendios forestales. A nivel regional, se mantiene hasta la fecha una estrecha relación con la “Red Regional de Incendios Forestales de América del Sur” así como en el “Grupo de Expertos sobre Fuegos Forestales de Latinoamérica y el Caribe” (GEFF-LAC) convocada por la Unión Europea (UE).

Los incendios forestales representan una amenaza y un constante desafío - tanto para las instituciones gubernamentales como del sector privado - que requiere la profundización de las acciones coordinadas en capacitación, sensibilización y fiscalización del cumplimiento de la normativa existente que se vienen implementando firmemente para la protección de nuestros bosques.

Referentes a la integración productiva – acciones en silvopastoreo

Los Sistemas Silvopastoriles (SSP) en nuestro país surgen como una alternativa de producción integrada entre los bosques y la ganadería, involucran el manejo del bosque nativo, los bosques de abrigo y sombra para el ganado así como aquellas plantaciones forestales con diseños que buscan optimizar el crecimiento de los tres componentes esenciales del sistema (pasto, árbol y ganado). Mediante el Proyecto URU/18/G31 “Creación de capacidades institucionales y técnicas para aumentar la transparencia en el marco del Acuerdo de París” se conforma en el año 2021 un equipo consultor seleccionado junto con equipos técnicos de la DGF, Dirección Nacional de Cambio Climático del MA y Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) para la “Definición, caracterización y cuantificación del área bajo sistemas silvopastoriles, para el seguimiento de las contribuciones establecidas en la Contribución Determinada a nivel Nacional de Uruguay”. El mismo logró resultados relevantes para avanzar en el diseño de políticas que permitan impulsar el desarrollo de estos sistemas a nivel nacional15 .

Por su parte, cabe destacar la fundación de la Sociedad Uruguaya de Silvopastorero (SUSILVO) en noviembre del año 2021, organización que nuclea productores, técnicos e instituciones que busca fomentar y promover los SSP como una oportunidad en los sistemas de producción.

Por otro lado, a iniciativa de la DGF, en conjunto con la Dirección General de Recursos Naturales (DGRN), en febrero de 2022 se crea el Grupo de trabajo dentro de la Mesa de Ganadería sobre Campo Natural (MGCN), conformado por representantes técnicos de distintas organizaciones, con enfoque a la interacción de “Árboles y ganadería”, preservando el Campo Natural.

Referentes a otros usos y agregado de valor de productos de la madera

  • Comisión Honoraria de la Madera (CHM)

La CHM es una iniciativa de la DGF creada por el articulo 282 de la Ley N° 19.92416. La misma declara de interés general la promoción de diferentes acciones para incrementar   la incorporación de madera de origen nacional proveniente de bosques manejados en la construcción de viviendas y edificios, su uso en carpintería de obra y mueblería. Es presidida por la DGF e integrada por representantes de Ministerio de Vivienda Ordenamiento Territorial (MVOT); Ministerio de Ambiente (MA), Ministerio de Industria, Energía y Minería (MIEM), Congreso de Intendentes (CI), Laboratorio Tecnológico del Uruguay (LATU)-Fundación Latitud, UdelaR y Universidades privadas; apuntando a la conformación de equipos técnicos con expertos de diferentes áreas del concomiento vinculados a la temática.

Producto de las actividades de trabajo surge y se está ejecutando el proyecto “Documentos base para la estandarización de edificaciones y construcciones en madera”, con la cooperación técnica de Fonplata y el Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA).

Dicho proyecto está alineado con los objetivos de la Comisión, y surge en respuesta a las demanda de generación de información de los distintos actores vinculados al área. Como resultados se esperan: a) una Guía técnica que contenga un conjunto de reglas de referencia que permita estandarizar en mayor grado y facilitar el proceso de diseño de las construcciones en madera; b) relevar el mercado, las capacidades instaladas, el estado de la normativa vigente y el porcentaje de edificaciones construidas en madera, para establecer un punto de partida para contribuir al desarrollo de una industria de la construcción con madera.

  • Centro Tecnológico Forestal Maderero (CTFM)

El CTFM es un ámbito de coordinación y articulación pública-privada para el sector forestal maderero que comienza a funcionar a partir del año 2022. Está conformado por un comité directivo integrado por la DGF, el MIEM, la Oficina de Planeamiento y Presupuesto (OPP), la Sociedad de Productores Forestales (SPF) y la Asociación de Empresarios de Madera y Afines (ADEMA), a través del Acuerdo de Inversión suscrito el 7 de noviembre del año 2017 entre Uruguay y la empresa UPM, establecido en el Decreto N° 477/008 reglamentario de la Ley de promoción, donde incluye un Fondo de Innovación Sectorial. Este fondo se financia con aportes de UPM durante 20 años y fondos concursables adicionales para proyectos específicos.

Busca crear ámbitos que faciliten el intercambio e integración de todos los actores vinculados al sector: Instituciones públicas gubernamentales y departamentales, academia e Institutos de investigación, desarrollo e innovación y empresas privadas. Dichas instancias tienen como objetivo la identificación de nuevas líneas de trabajo y desafíos a resolver en las distintas fases de la cadena forestal, incluyendo líneas concretas para impulsar el desarrollo de las MIPYMES. Asimismo, establecer y profundizar vínculos con Instituciones internacionales de investigación, para desarrollar redes tecnológicas que apoyen a la innovación en el sector. Por último, fomentar la difusión del conocimiento generado para impulsar y diversificar otros usos de la madera y sus derivados, asi como, promover y fomentar un cambio en el patrón cultural de la sociedad sobre la percepción del uso de la madera.

  • Intercambio técnico con otros países: caso de Alemania y Suecia

Suecia: La DGF ha estado cooperando e intercambiando técnicamente con la Embajada de Uruguay en Suecia, a través del Ministerio de Relaciones Exteriores y la organización Business Sweden (quien relaciona el gobierno sueco y el sector empresarial privado en Suecia), para profundizar líneas de trabajo relacionados al sector forestal y buscar alianzas y cooperación entre ambos países.

En este sentido, la DGF ha aportado información del sector forestal y participado de presentaciones sobre el mismo como apoyo para fomentar inversiones privadas en nuestro país. Así mismo, entre las partes se realizó una jornada técnica “Construcción en Madera - La experiencia sueca” con el aporte de profesionales del área, de forma de contribuir al conocimiento en sistemas de construcción en madera e intercambiar con los proyectos y desafíos que tiene nuestro país para avanzar en la temática.

Alemania: En el año 2015 se firma una Declaración Conjunta de Intenciones para cooperación entre los ministerios de agricultura (MGAP y BMEL) en temas forestales, incorporando el área de bioeconomía en la cooperación bilateral en el año 2017. A partir de allí surge la propuesta de trabajar en una Estrategia Nacional de Bioeconomía, proceso que fue liderado por el MGAP y que fue publicado en el año 2020.

A su vez impulsó la participación de Uruguay en el Grupo de Trabajo Internacional en Bioeconomía Sostenible (ISBWG), coordinado por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y financiado entre otros países por el propio gobierno alemán. En los últimos años se han desarrollado varias instancias de intercambio entre técnicos de DGF y una delegación del BMEL con el propósito de promocionar la cooperación en bioeconomía forestal basado en los antecedentes mencionados.

  • Red de Desarrollo Maderero de Rivera (REDEMA)17

A partir del año 2021, DGF participa activamente en diversas actividades de la red a través del apoyo técnico e Institucional. REDEMA es una red creada en el año 2016 en Rivera, que se extiende actualmente a los departamentos de Tacuarembó y Cerro Largo, cuyo foco de trabajo está orientado a Medianas y Pequeñas empresas (MIPYMES) del sector maderero.

Este espacio de intercambio se integra por distintos actores nacionales y territoriales vinculados a la cadena foresto-industrial, coordinado por las Intendencias departamentales involucradas. Para el conjunto de las MIPYMES, la red se orienta al relevamiento y coordinación de las necesidades de capacitación empresarial articulando con los programas nacionales disponibles e Instituciones vinculadas en la región. Además, trabajan en la identificación y solución de las necesidades de financiamiento, en la mejora de los servicios de proveedores locales para los aserraderos y en la organización de grupos de compra entre las empresas (materia prima, maquinaria, etc).

  • Hoja de ruta sectorial regional de la madera en la región Noreste de Uruguay18

Este trabajo se enmarca en el Proyecto “Fortalecimiento de la industria de la madera de   la Región Norte, con énfasis en la competitividad de las MIPYMES”, llevado adelante a través del trabajo conjunto entre las Intendencias de Rivera, Tacuarembó y Cerro Largo, el Municipio de Tranqueras y la Asociación de Empresarios de la Madera y Afines (ADEMA), con apoyo de la Agencia Nacional de Desarrollo (ANDE), CI y Unión Europea (UE). La DGF integró el Comité interinstitucional de seguimiento de la hoja de ruta sectorial regional y participó de otras instancias de consulta y talleres. Este Comité estuvo integrado además, por el MIEM a través de la Dirección Nacional de Industrias (DNI) y la Dirección Nacional de Artesanías, Pequeñas y Medianas Empresas (DINAPYME), el LATU,  junto a los socios  del Proyecto. El objetivo general de dicho proyecto fue “promover el fortalecimiento de    la competitividad de las MIPYMES del sector de la madera en la región, con redes locales consolidadas tendientes a desarrollar un manejo sostenible del sector”. Se realizaron distintas actividades, involucrando a los diferentes actores del sector forestal del ámbito público y privado, cuyo resultado fue un documento consensuado que contiene una hoja de ruta y priorización de acciones, identificando a su vez, los actores directos e indirectos cooperantes en cada línea de acción.

  • Hoja de Ruta para la Construcción de vivienda social en madera – MVOT19

Con el apoyo del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), el MVOT ha liderado la elaboración de una “Hoja de Ruta para la Construcción de Vivienda Social en Madera”. Conjuntamente con otras Instituciones y actores privados vinculados a la construcción en madera, la DGF participó en distintas actividades de consulta para su elaboración. La hoja de ruta priorizó 10 líneas de acción tendientes a promover el uso de la madera de origen nacional en soluciones constructivas de interés social, además de identificar los actores relevantes en cada una para la conformación de grupos de trabajo en el corto plazo.

2.1. Acciones e iniciativas vinculados a bosques nativos

En lo que respecta a bosques nativos, según la última cartografía disponible la superficie es de 835.349 ha, lo que equivale a una cobertura a nivel nacional del 4,7%. De la misma, el 74% de la superficie se encuentra registrado ante la DGF, y un 29% del mismo presenta algún tipo de plan de manejo.

La DGF ha tenido y tiene un rol clave en la conservación de los bosques nativos de nuestro país. Es necesario destacar que el desarrollo productivo del país de los últimos 150 años   ha generado cambios en los ecosistemas naturales siendo los bosques nativos los que han sufrido gran parte de dicho proceso, cediendo áreas, perdiendo biodiversidad y parte de su base genética.

Las dos guerras mundiales provocaron una grave crisis energética y aumento de precios de maderas, lo que desencadenó en la explotación y tala desmedida de los bosques nativos para elaborar astillas, estacones, carbón de leña, etc. Más recientemente la instalación    de cuatro represas hidroeléctricas causó la pérdida de unas 30.000 ha de bosques nativos marginales al Río Negro, Uruguay e islas.

A partir de la primera Ley Forestal N° 13.723 del año 1968, se desarrollan las primeras políticas enfocadas a la protección y conservación del bosque nativo. La prohibición de corta, creación de un registro de bosques y los planes de manejo, permitieron que en pocos años Uruguay recupere parte de su superficie de bosques.

Uruguay fue pionero en un concepto similar al hoy en día llamado: “Pagos por Servicios Ambientales” (PSA). Desde el año 1968 en donde se crea el registro de bosques, se otorgan exoneraciones tributarias sobre las áreas declaradas. El registro de bosque es la primera medida en cuanto a conservación de los bosques nativos por el cual, los productores declaran sus bosques obteniendo exoneraciones impositivas. Estas exoneraciones comprenden todos aquellos tributos que gravan genéricamente a las explotaciones agropecuarias, a sus titulares o a sus rentas y para usufructuarlas, el bosque debe estar calificado e inscripto por la Dirección Forestal en el Registro Nacional de Bosques.

El decreto N° 330/993 establece que la corta y extracción de productos forestales del bosque nativo deberá realizarse previa autorización de la DGF, a esos efectos los interesados deberán presentar una solicitud acompañada de un informe técnico, redactado de acuerdo al instructivo que proveerá la DGF en el que se establecerá, entre otros, los motivos que fundamentan la corta y los planes de explotación a efectuarse.

Los Planes de Manejo de bosque nativo son evaluados por los técnicos de la DGF en pos de propender al manejo sostenible de los bosques. Es por eso que la zonificación de las áreas arboladas del establecimiento es un aspecto clave en los diferentes sistemas productivos. Entendemos la zonificación como el proceso mediante el cual se le asigna una técnica de manejo a cada tipo de bosque, lo que se realiza en función de las características cualitativas y cuantitativas del bosque, la posición topográfica, las condiciones edafoclimáticas, y el uso asociado al tipo de bosque.

El MGAP viene trabajando en un sistema que permitirá al usuario realizar cada uno de estos trámites a través de la web, para facilitar el acceso y disminuir los costos del administrado para lograr un mayor alcance en todo el territorio y apoyar la descentralización. A su vez, permitirá contar con información actualizada y sistematizada, con el objetivo de elaborar informes y estadísticas.

A partir del Plan de Manejo se otorgan guías de tránsito, el transporte de más de 1.500 kilogramos (Kg) de productos forestales provenientes de bosque nativo, deberá ir acompañado de una guía de tránsito que expedirá la DGF, la cual será válida para un solo desplazamiento y solo podrá utilizarse dentro de los 3 días siguientes al de su expedición por el remitente. El Ministerio del interior, a través de la guardia rural y la policía caminera colabora en el control sobre las rutas.

Tanto la corta ilegal, como el transporte o tenencia de productos del bosque nativo sin autorización, lleva a sanciones económicas y decomisos. Los contralores de tala ilegal se realizan por 3 medios. A campo (en territorio), en rutas y en barracas. Los puntos de venta, en este caso las barracas, deben estar inscriptas en DGF y contar con las mismas guías de tránsito que aseguren la trazabilidad de la leña. En el 2021 se aplicaron 23 sanciones en terreno, se detuvieron 5 camiones de leña y se incautó 100.700 kg de leña en barracas que no contaban con las guías pertinentes.

Los actores vinculados a la sostenibilidad de los bosques son diversos, por lo que el MGAP ha lanzado la SENDA NATIVA21, una campaña de comunicación que busca impactar en cada uno de los actores vinculados, productores, transportistas, barraqueros y público en general.

Otro proyecto que está en marcha, realizado en conjunto con la UE, busca generar una cadena de certificación asociada a los productos exportables, donde se garantice que la unidad productiva está libre de deforestación y se maneja en forma sostenible. Esto permitirá trasladar parte de los precios de los productos al manejo de los bosques, lo que impactará directamente en una mejora del estado de conservación del bosque.

Hasta la actualidad, no se ha podido evaluar con precisión el estado y vitalidad de los bosques nativos a nivel nacional por falta de un monitoreo continuo sobre fragmentación, deforestación y degradación. Por lo tanto, siguen algunos retos como pérdida de superficie boscosa en algunas zonas y tipos de bosques (bosques de parque, palmar, psamófilo) amenazados o en estado de relicto, amenazas por especies exóticas invasoras (EEI), degradación por presión de ganado, incendios y erosión del suelo y deforestaciones ilegales.

En relación a las EEI, desde la creación por parte del MA del Comité de Especies Exóticas Invasoras (CEEI), se han llevado adelante diversas acciones en forma coordinada con representantes de la DGSA, INIA, Ministerio de Transporte y Obras públicas (MTOP) y DGF quien lidera el subgrupo Leñosas – pastizales, quienes han trabajando en proyectos de relevancia a nivel nacional como el “Plan Piloto CEEI - Potrero Grande en Rocha”; “Proyecto FAGRO en Sierras del Este, Lavalleja” así como en el “Plan de Manejo Área Protegida Sierra de Ríos  en Paso Centurión”

La DGF además cuenta con un Centro de Germoplasma en el Vivero Nacional Dr. Alejandro Gallinal, que tiene como objetivo mantener un banco de material reproductivo de especies arbóreas que permita el desarrollo y mantenimiento del recurso forestal y del bosque nativo.

Es clara la importancia de conocer los recursos fitogenéticos de las especies arbóreas autóctonas, y desarrollar una base de materiales de origen conocido y con alta variedad genética  tanto para su conservación como para la rehabilitación de estos ecosistemas. Hace falta desarrollar más conocimiento relacionado al manejo, conservación y reproducción relativas a las especies nativas.

Los centros de Germoplasma juegan un rol importante para el manejo forestal  sostenible y     el mantenimiento de la diversidad genética, factor de suma importancia para la adaptación y mitigación en un contexto de cambio climático. Además, el vivero tiene un rol clave en torno    a actividades de divulgación y extensión en forma permanente sobre temas vinculados al ecosistema bosque (importancia de su conservación y manejo forestal sostenible) y una reseña histórica del mismo, donde concurren alumnos de varios centros de enseñanza y de todos los niveles educativos.

Vinculado al monitoreo de los bosques, entre el año 2021 y 2022, la DGF ejecutó el Proyecto de “Fortalecimiento de las capacidades de gestión para la protección del bosque nativo” en el marco de la Iniciativa para el Río Negro (Decreto N° 298/018) el cual tiene como objetivo velar por la calidad del agua del mismo. Éste tuvo como objetivo la mejora de la gestión del bosque nativo en el alto del río Negro, con énfasis en el fortalecimiento del sistema de monitoreo del mismo.

Este Proyecto, permitió generar información de alta calidad en el área de estudio con información cualitativa y cuantitativa del estado de situación de los bosques, así como ser un área piloto para rever metodologías para futuros Inventarios Forestales nacionales. Los resultados obtenidos son insumos adicionales para el desarrollo de políticas y la planificación estratégica de este recurso22.

Por último, para ser conservado, el bosque nativo debe ser manejado de forma sostenible, y monitoreado de forma permanente. Por ello que en el corriente año se realizará una nueva cartografía, siendo que la última fue realizada en el año 2016, insumo fundamental para evaluar si las medidas implementadas siguen los objetivos planteados o se requieren tomar medidas complementarias para alcanzarlos.

  • 3. Reflexiones finales23

Uruguay cuenta actualmente, y producto de la Política Forestal Nacional, con recursos forestales en cantidad y calidad que permiten continuar avanzando en el desarrollo industrial para los diferentes usos de la madera, con bosques que han sido plantados para tal fin.

El desarrollo del sector forestal se ha logrado con una política eficiente y responsable en la conservación de sus bosques nativos, implementado políticas desde los años 60 pioneras en medidas de protección y uso sostenible del recurso, siendo uno de los países de la región que ha incrementado su área en los últimos años.

La señal que está dando el país en esta materia es muy importante, siendo la superficie de bosque nativo uno de los indicadores claves en los compromisos internacionales asumidos. A traves de un bono soberano, indexado a indicadores de cambio climático, Uruguay se comprometió a mantener o incluso aumentar la superficie de este ecosistema, lo que nos destaca favorablemente frente a los demás países de la región.

La DGF continua avanzando y articulando en el trabajo interinstitucional e interdisciplinar como estrategia de generación y transferencia de conocimientos e innovación entre los distintos actores vinculados a los recursos forestales del país. Además, impulsa y coordina diferentes acciones y proyectos que apuntan a alcanzar los objetivos planteados dentro de sus cometidos. En esta línea, viene participando y apoyando otras inicitivas generadas desde otras Instituciones y grupos de trabajo antes mencionados.

Aún en este contexto,existen desafíos paracontinuarconeldesarrollo,laconservación, protección y gestión de los recursos forestales del país. Algunos de ellos responden a seguir avanzando en investigación y líneas de trabajo que apunten a la generación de conocimiento sobre los diversos beneficios de los recursos forestales para la sociedad en su conjunto. Mantener y profundizar  la colaboración entre Instituciones públicas, actores privados y sociedad civil involucrados en el manejo de los recursos, es clave para el logro de éstos objetivos.

Desde la Institución también se deberá avanzar en el intercambio de experiencias sobre el manejo silvopastoril con bosques nativos y los impactos del ganado sobre este ecosistema, como también, en aquellos sistemas ganaderos tradicionales que han integrado árboles en diseños que permiten optimizar las sinergias entre ambas producciones.

Entre los aspectos de planificación y logística del sector forestal, es importante considerar las cifras sobre los volúmenes anuales de extracción que se proyectan para el corto y mediano plazo, y el desarrollo industrial que sigue avanzando. Continuar inviertiendo en infraestructura vial, del ferrocarril central y la incorporación de Bitrenes y Tritrenes que permitan un transporte más eficiente, es clave para afrontar este crecimiento. Así mismo, es importante avanzar en el desarrollo y uso de biocombustibles a partir de biomasa forestal residual e hidrógeno verde.

Otro de los desafíos, es continuar apoyando con acciones concretas los procesos que se vienen ejecutando a través de diferentes actores sobre el uso de madera nacional con fines estructurales, carpintería de obra y mueblería, así como profundizar en el desarrollo de normas nacionales de calidad para tales fines.

Uruguay ha avanzado hacia los nuevos conceptos que han cobrado relevancia a escala mundial como son la Bioeconomía, Economía circular y Bioeconomía Circular, sentando las bases en la consolidación de la Estrategia Nacional en Bioeconomía. Se espera contar en el año 2023 con un Centro Tecnológico en Bioeconomía, con sede en Paysandú, para avanzar en dicha temática a nivel nacional.

Por último, es importante continuar con estrategias de comunicación efectivas que permitan un vínculo más estrecho con la sociedad en su conjunto, para dar a conocer la importancia en la conservación y gestión sostenible de los recursos forestales del país.

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